Desde los requisitos hasta cómo son todas las partes del examen de oposición, aquí encontrarás toda la información que buscas si estás planteándote presentarte a la próxima convocatoria de oposiciones de primaria para conseguir una plaza.
Si soñaste toda tu vida con ser docente y poder enseñar a los demás, y decidiste dirigir tus estudios hacia el ámbito educativo, seguramente lo que más desees sea presentarte a las oposiciones y conseguir una de las miles de plazas que ofertan las distintas administraciones autonómicas en cada Comunidad.
Para muchos maestros, las oposiciones son la principal salida laboral gracias a que cada año salen a concurso nuevas plazas para dedicarse a la docencia en miles de centros educativos públicos, tanto colegios como institutos, en territorio español. Cada oposición consta de diferentes requisitos. Por ejemplo, las que piden en las oposiciones de primaria no serán las mismas que las que pidan para las de enfermería, y para poder consultarlas siempre es muy importante hacerlo desde alguna fuente o enlace oficial y de confianza. Hay que informarse correctamente antes de inscribirse en las oposiciones y preparar el proceso de selección.
Aunque los requisitos varían dependiendo de la oposición, suelen ser siempre los mismos año tras año, al igual que el temario y el tipo de pruebas.
Los requisitos generales para poder presentarte a las oposiciones de primaria son los siguientes:
- Tener la nacionalidad española o ser ciudadano de alguno de los países y naciones que constituyen la Unión Europea
- Haber cumplido los 18 años de edad y no haber alcanzado la edad de jubilación
- No padecer ningún tipo de enfermedad o limitación física que afecte al desempeño de las funciones correspondientes
- No haber sido expedientado disciplinariamente ni inhabilitado para el desempeño del ejercicio de funciones públicas
- No ser funcionario de carrera del mismo cuerpo al que se quiere opositar
- Acreditar que se posee el conocimiento de la lengua cooficial de la Comunidad Autónoma que convoca dichas oposiciones
- Estar en posesión del título de Maestro/a o el título del grado correspondiente
Las oposiciones de primaria suelen constar de dos fases: la fase de oposición y la fase de concurso.
En la fase de oposición hay un objetivo principal que es identificar una serie de competencias y de condiciones en cuanto a la personalidad, las actitudes y conocimientos de la persona que va a opositar con el fin de elegir a las personas perfectas para el puesto determinado de trabajo a ocupar.
Durante esta fase se realizan dos pruebas: las teóricas y las prácticas. En las teóricas se pone a prueba el conocimiento que se ha adquirido tras estudiar el temario oficial, mientras que en las prácticas se realizan varios ejercicios prácticos para comprobar que el opositor reúne todas las habilidades técnicas y conocimientos científicos que corresponden a la especialidad por la que quiere optar. Además, también tendrás que prepararte y presentar una defensa oral de una preparación didáctica, junto a una exposición de una unidad didáctica.
En cuanto al temario de estas pruebas teóricas ,correspondientes a las oposiciones de primaria, se debe estudiar y conocerlo perfectamente con el fin de poder demostrar durante el examen que se ha entendido el contenido del temario. Lo habitual durante el examen teórico de las oposiciones es desarrollar un tema por escrito que podrás escoger entre dos diferentes, escogidos previamente por el tribunal y que habrán aparecido en el temario oficial.
Si te matriculas con nosotros, Conecta Oposiciones te facilitará todo el material necesario para superar tus oposiciones de primaria, entre el que se encuentra el temario oficial de dicha convocatoria.
Por otro lado, las pruebas prácticas son bastante diversas y se realizan con el fin de poder evaluar las distintas aptitudes de la persona que está opositando. De esta forma pueden comprobar si el candidato reúne las competencias y habilidades idóneas para el puesto. En el caso de las oposiciones de primaria, el tribunal evalúa las habilidades y aptitudes pedagógicas junto a la capacidad para enseñar y comunicar los conocimientos sobre el tema en concreto. En algunas situaciones es posible que existan variaciones en la prueba práctica, aunque generalmente el opositor debe programar y defender una unidad didáctica de forma oral.
Llegados a este punto, en la fase de concurso se valorarán dos competencias: la formación académica y la experiencia docente. Los baremos aparecen recogidos en el documento legal que corresponde a cada oposición, y dentro de esa cifra se tienen en cuenta varios puntos:
- El sistema de evaluación de los méritos
- El máximo de puntos de cada competencia
- El total de puntos máximo
Existe la posibilidad, dependiendo de algunas oposiciones, de que únicamente los candidatos que han superado la fase de concurso, pasen a esta fase de concurso.
Si necesitas algunos consejos, nosotros desde Conecta Oposiciones te podemos hablar sobre las normas básicas, así como de los errores que son muy comunes y se deben evitar por completo.
En primer lugar, lo primordial es organizarte y planificarte el tiempo de forma realista e integral considerando todos los temas y las pruebas a preparar, teniendo en cuenta el tiempo del que disponemos dependiendo de nuestro estilo de vida.
Luego, poner en práctica las técnicas correspondientes de estudio y asimilarlo todo. Ya sea mediante el subrayado, los esquemas y mapas conceptuales o cualquier técnica, es una forma eficaz de absorber la información mediante la repetición. No se recomienda el estudio intenso a última hora, pues no da buenos resultados.
También hay que mantenerse positivo y motivado, y no subestimar las pruebas orales ni improvisarlas en el momento del examen, ya que esta parte del examen tiene mucho peso luego en la nota final. No prepararse correctamente esta prueba oral podría ser fatal tras meses de preparación. Trata de ensayarlas repetidas veces delante de compañeros o grabarnos en vídeo para luego visualizarlos y corregir cosas.
Finalmente, dos de los fallos más frecuentes son contestar con argumentos pobres a las preguntas que hacen los miembros del tribunal durante el debate y no terminarlas con una conclusión contundente.